La población mundial apoya masivamente la acción climática.
En el sector científico no hay duda alguna sobre la existencia de un cambio climático causado o, cuanto menos, exacerbado por la actividad humana. Sin embargo, este consenso no tiene un reflejo en el ámbito político y mucho menos se traslada a la burbuja de las redes sociales, donde el negacionismo del cambio climático antropogénico hace mucho ruido.